martes, 4 de febrero de 2014

Memoria errante.. Un poco de historia de los Magne

Magne, un apellido que muchos no saben siquiera pronunciar. Ese es mi apellido, con historia de Piratas, Pampinos, Guaneros y bolas de perro.
Hoy una gran sorpresa me dio un querido amigo Scout, en sus frecuentes salidas a recorrer la pampa salitrera se encontró con un cementerio y en el una lapida de BENARDINO MAGNE O. de 1929.
Mi amigo Sebastian Tapia, quien tras su aventura por la pampa en su bicicleta, cual Ernesto Guevara recorriendo sur america, encontró esto que casi ya habíamos olvidado, la tumba de mi Tío Abuelo BERNARDINO MAGNE OSSANDON.

Mi abuelo, GILBERTO MAGNA OSSANDON (apellido inscrito mal en el registro civil de esos años, lo que luego con sus hijos se rectifica) nos llevo muchas veces a visitar esa parte olvidada de la historia de nuestro país, esa parte llena de esperanzas forjadas en hombres y mujeres que en muchas ocasiones con sangre escribieron las páginas mas atroces de la patria. Mi querido Abuelo, trabajo de pequeño en las salitreras, allí junto a su padre y sus hermanos y hermanas (Luzmira, Graciela(la tia chela), Juana, sus hermanos Guillermo, Pedro y Benardino), mojaron sus espaldas por construir un futuro para sus descendencias, el tiempo diría que su hermano de tan solo 18 años moriría allí en Salitrera Alto San Antonio, donde hoy sus restos descansan olvidado incluso por su propia familia.
Luego del debacle del salitre la familia tuvo que emigrar, por esos días la obligada bajada al puerto grande o a los puertos menores, llevaron a parte de la familia a seguir pelando el ajo en la costa, el lugar elegido, las Guaneras de Huanillo, donde estuvieron asentados por otro tiempo más, cuantas veces mi abuelo me llevo a acampar a la playa desde Punta Negra Patache Hasta Huanillos, cuantas historias contadas que hoy vuelven a la memoria, como cada tropiezo o cariño verbal, me enseñaba a forjar mi propia vida, a veces cuando amanece en la playa, aun escucho su voz gritando "mira como saltan los lenguados..  Marina mira las cabrillas", ese era mi abuelo quien cada año me llevaba a comprar mis alpargatas de cañamo, esas que no se resbalan en las piedras en patache. 

La historia y la memoria, a veces divorciada por culpa del olvido, por culpa del presente incansable, es ella la que enriquece el ser, es ella, la memoria la que da sentido a nuestra vida, no somos solo nosotros recién empezando, somos nosotros continuando la escritura de este libro lleno de letras, de aquel alfabeto de enseñanzas, de aquellas poesías garabatezcas con amor. Recién he llamado a mi tío Gilberto Magne Castillo, le comente lo de esta foto y vamos a organizar una subida con mi tio Nelson y el  que se sume, y así recorrer los pasos que alguna vez dieran aquellos hombres y mujeres que también escribieron un capitulo, un poco olvidado, de la historia de una Familia, los bolillas, Los Magne.. 

.. Para recordar al tío abuelo que no conocimos pero que esta en nuestros corazones, Benardino Magne Ossandon, sigue descansando en su pampa, en Oficina Salitrera Alto San Antonio, Iquique.